Preguntas para pensar

1. Porque si/no crees en dios?
- razones contundentes, no niñerias porfavor.

2. Porque necesitas creerte mas que los demás?
- ya sea por cultura, intelecto o aun estan los que se creen mas que los demás solo porque dicen respuestas que asumen cheveres: o sea, por decir no creerse mas que los demás.

3. Porque no hacemos nada?
- como seres humanos somos tremendamente poderosos y; sin embargo, no hacemos nada. hay guerras por todos lados y no hacemos nada. y, obviamente, estan los imbeciles que van a una marchita pacifica con carteles que dicen NO A LA GUERRA y creen que suficiente. llegan a sus casas y se creen mejores que los demas porque ellos le dijeron que NO A LA GUERRA! idiotas de mierda, inutiles e inservibles.

existe gente con caca en el cerebro, como nosotros ahorita, antes de respondernos todas estas preguntas. respondamoslas. luego, ayudemosles. por favor.

Acerca de la pena capital

Pena Capital

Hoy yo, Omar Pinedo, me planteé seriamente la siguiente pregunta:

- ¿si aun viviera hoy, Jesús el nazareno estaría de acuerdo con la pena de muerte?

luego, tambien se instalaron en mi pensamiento las siguientes:

- ¿apoyaría el esta causa?

- ¿arrearía a sus corderos para que anden esos rumbos?

Naturalmente, la primera palabra que surgio fue:

- No

Pero, leyendo el antiguo testamento y sus leyes...

- ¿Dios me insta realmente a ejecutar a aquel que haya cometido asesinato?

- Sí

Y me pregunté ¿por qué la respuestas que inmediatamente halle fueron estas?. Encontré que era conducido por un sendero que se bifurca, se contrapone lo antiguo a lo nuevo. De este modo, el antiguo y el nuevo testamento son tradiciones distintas y cronológicamente distantes que recogen el conocimiento ético supremo de su tiempo y como tales documentos han de ser entendidos. En esta situación, debemos hacer un uso mas intenso de la capacidad fantástica de pensar, la habilidad de articular la palabra, la misma que nos define y da parte de nuestro sustento.

Entonces, haciendo un escueto análisis, hallamos que las leyes del decálogo son por mucho inferiores a las enseñanzas de Jesús de Nazaret por lo siguiente:

- Analicemos algunas cosas que el decálogo (lista de los 10 mandamientos) nos dice...

1. Honraras a tu padre y a tu madre - Lo que nos insta a tenerlos en mayor valía que al resto de hombres

2. No matarás - Lo que nos revela que en nuestro corazón se halla latente la posibilidad de cometer homicidio

3. No hurtarás - Lo que nos revela que en nuestro corazón se halla latente la posibilidad de cometer hurto

4. No codiciarás - Lo que nos revela que en nuestro corazón se halla latente la codicia

El primer punto nos alienta a la división en familias o tribus sobre las cuales derramar nuestro respeto y cariño, mientras que Jesús nos alienta al amor universal al él mismo olvidar estos animos de división al decir...

'...¿Quién es mi madre, y quienes son mis hermanos? y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: he aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre.'

Mateo 12.48-50

Así, no es correcto que la regla que da la perfección a quien la sigua diga ama a unos y a otros no, o ama mas a unos y a otros menos, sino es correcto que diga ama al mundo entero por igual, porque Dios no ama a unos y a otros no, o ama a unos y a otros menos, sino ama al mundo entero por igual, porque un padre no ama mas al hijo que le obedece en todo y menos al que le es desobediente, sino los ama por igual, y se regocija por igual cuando sus hijos hacen conforme a su palabra o incluso se regocija más cuando el más desobediente le obedece.

Con respecto a los ultimos tres puntos del decálogo de los que hago mención, hallamos que el corazón humano es uno en el cual hace nido el homicidio, el hurto y la codicia. Entonces, es lógico deducir que en todos los corazones humanos hay algo de maldad. De acuerdo con esto, los hombres estamos llamados a desconfiar unos de otros, pues existe la posibilidad latente de que el hombre cometa homicidio, hurte o codicie en perjuicio nuestro.

Frente a este llamado a la desconfianza y la desunión encontramos la regla de oro dada por Jesús el nazareno...

'...Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas.'

Mateo 7.12

Análizando esta pequeña oración encontramos la máxima del nazareno y su mensaje universal para con los hombres. Primero, Jesús nos habla acerca de la naturaleza del corazón humano al decirnos haz a los otros como quieras que hagan contigo. Es lógico y sensato que, aun los villanos mas retorcidos, deseen que el resto actúe con ellos conforme al bien; esto significa que en todos los corazones humanos habita algo de bondad. Este es un llamado a la confianza recíproca y a la esperanza en todos los hombres y gentes del mundo.

En este aspecto, la regla de oro dada por Jesús supera con creces a estos mandamientos (pues dentro de ella hallamos a estos mandamientos, al ser natural que nadie desee ser objeto de homicidio, hurto o codicia, además, como ya vimos, esta asunción es la genésis de la esperanza) porque no se nos comanda a No Hacer el Mal a nuestro prójimo, sino se nos comanda a Hacer el Bien a nuestro prójimo, lo cual es un mandato superior, pues podría cumplir el primer mandato No haciendo Nada por mi projimo, no siendo asi con el último; así, aunque ambas buscan la erradicación del mal sobre la tierra, ambas difieren en el método.

Además, debemos entender por qué Jesús cumplio la ley a cabalidad y yo encontré que se debe a una cosa sencilla explicada por él mismo y que también fue algo pensado siglos antes por Sócrates de Atenas: uno debe ser siempre conforme a la ley bajo la que se rige, de lo contrario es injusto e inicuo, pues estas leyes son un contrato firmado por la sociedad entera para su convivencia, son un mutuo acuerdo entre el grupo entero y cada uno, faltar a su palabra es caer en la injusticia. Por ejemplo, si no me agradan las leyes de un país, pues me mudo de él sin infringir ningunas de sus leyes mientras me halle bajo su jurisdicción; por esta razón, Sócrates aceptó beber la cicuta que le impusieron los atenienses.

Esta situación es abordada, como ya hice mención, por Jesús cuando dice...

'...No lo que entra en la boca contamina al hombre; mas lo que sale de la boca, esto contamina al hombre.'
Mateo 15.11

Esto quiere decir que es infinitamente mejor ser objeto de injusticia que cometer injusticia alguna, porque el recibir una injusticia no nos hace injustos, mas el cometerla nos hace faltos de justicia y por tanto indignos.

Dicho esto, me pregunto yo ¿es justo quitar la vida a un hombre? ¿no va contra la moral ejecutar a un ser que por naturaleza alberga en su corazón bondad y bien? ¿entonces, es valido para un cristiano desoír a Jesús y perder la esperanza en otro hombre al eliminarlo? ¿somos quienes para descartar asi de plano a otro ser semejante?

Yo creo que cuando un homicida asesina por primera vez es su responsabilidad y si un homicida asesina una segunda vez es ciertamente responsabilidad de la sociedad, pero no por no ejecutarlo, sino por dejarlo en libertad antes de haberlo reformado propiamente y si es imposible reformarlo, pues intentarlo hasta que sus dias en la tierra se hayan extinguido.

Sea esta carta una luminaria para el trazo de su propio camino para todo aquel que, como yo, en algún momento buscó respuestas a sus preguntas.

Iglesia 1

el domingo pasado el pastor de la iglesia de mi mama, iglesia cristiana bautista a la que asisto todos los domingos a pesar de no ser cristiano, hablo acerca de los 10 mandamientos y de como son MANDAMIENTOS y no SUGERENCIAS como suelen asumir las personas actualmente. Conforme avanzaba en su predica, saltaban a mi mente mas interrogantes que respuestas y, en el punto de la pena capital, estallo una vena en mi cerebro y decidí escribir una carta al mundo cristiano en general porque EL PASTOR DE LA IGLESIA DE MI MAMA ESTABA DE ACUERDO CON LA PENA DE MUERTE O_O. He decidido que la carta vea luz en hora pronta.