¨El hombre que no ha amado apasionadamente ignora la mitad mas hermosa de la vida¨
- Stendhal
Stendhal claramente incluye la experiencia de amar en el conjunto de experiencias vitales no por relativa a la vida, sino por su indispensabilidad para vivir; sin embargo, es desconcertante la manera en que deja abierto el tema del objeto de el amor: puede ser un amor apasionado al trabajo, al vicio, a el dinero, al carro, al sandwich triple o a un semejante (claramente, se necesita una precisión previa de lo que es el amor).
Asumiendo que se trata de una persona, puede entenderse a este ser amado como nuestra mitad mas hermosa de la vida: una idea de completitud mediante el encuentro, la conexion de las partes (o peor aun, la anexion de una de ellas a la otra), mas no la fusión de estas. Basicamente Yo soy una mitad, Tú otra. Solo somos el complemento del otro, solamente espejos amorfizantes en los cuales se refleja lo que le falta a el otro. Siempre un vacío, un espacio entre las mitades.
¿Es ese el amor al que se aspira?
El amor al que aspiro es uno en el cual pueda, feliz, diluir mi propia identidad en pos de un ente nuevo y único: Yo no soy una mitad; Yo soy Tú y Tú eres Yo; pero a la vez no somos ni Tú ni Yo: somos Nosotros.
Así, podriamos decir, querido cronopio, que el hombre que no ama apasionadamente a una mujer nunca conocerá la máxima expresión de la vida.
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Que me disculpe la comunidad gay (representada siempre por Papalia y Panetón) por decir Hombre que ama a Mujer y no generalizar a Persona que ama a Persona. Así sonaba mas romantico =)
ResponderBorrarouroboros es notorio que no dispones de información veraz, porque todos sabemos que panetón es un machazo
ResponderBorrarEstimado omar:
ResponderBorrarAl inicio todo anduvo bien, sin embargo, apenas afirmaste -el hombre que no ama apasionadamente a una mujer nunca conocerá la máxima expresión de la vida- me originó un agudo dolor de estómago.
Dale, amigo, no seas conservador, puritano. Esa afirmación es sumamente trasnochada. ¿Acaso no puedo dedicarle todo mi amor a Dios? Poco gente la ha experimentado, quizá ello sea un tanto atípico en una sociedad afiebrada como la nuestra. La vida es tan compleja que no se limita solo a amar a una flaca para saltar de alegría prístina.
¿Si dos hombres (gays) se aman desenfrenadamente? ¿Los solterones eternos son menos que los demás?
Por otro lado, el comentario de arriba me desconcertó. ¿Acaso alguien duda de mi virilidad? Me le he declarado a un nutrido número de flacas de la UP, incluso durante las clases. !Rectifíquense!
Jorge P.
PD: te felicito por el estupendo blog teñido de filosofía.
Lo que sucede Papalia es que no te hablo de una afiebrada alegría pasajera, sino de un auténtico amor absoluto. Es por esta misma razon que excluyo a Dios de la ecuación: No podemos formar un ser nuevo fundiendonos con Él, no podemos diluir nuestra propia esencia en Él. Él ya lo es todo.
ResponderBorrarte olvidaste del amor a jose papi
ResponderBorrarJajaja! Panetón no es maricueca...
ResponderBorrarEn realidad Omar que genial la forma de plasmar lo que es el amor... y el hecho magnifico de su manifestacion en esa otra persona que a la distancia y entre la multitud de billones, trillones sea solo UNA (o uno): nuestro complejo enzima-sustrato.
Hectorin :)
Quiero agradecer al primer anónimo por decir que soy un machazo (no creo serlo, soy un simple heterosexual), pero bueno fauno creo que de cierta forma la profundidad de tus palabras aumenta confome al nivel de insanía que puedes tener, que en ti es bastante elevado
ResponderBorrarEl YO es mas fuerte!!! y es el centro para el amor!!! para sentir plenitud en amar hay que estar completos!!
ResponderBorrarel yo no puede ser centro del amor, porque apenas confirmas tu completitud sin el otro significa que no necesitas de el ni requieres de el, por tanto es imposible poder sentir algo por alguien que no nos es util para crecer y completarnos.
ResponderBorrarSin necesidad, ni complementaridad llegamos al amor puro. Pues la esencia misma nos une y no un vacio que esperamos sea llenado por alguien mas. Es el encuentro cn nosotros mismos el que nos permite la mirada hacia el otro
ResponderBorrardifiero, pues si es nuestra escencia misma la que nos une, significa que un poco de nuestra escencia esta diluida en la del otro, por tanto, solo tras la fusion se halla un sentido de completitud ^_^
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